Cuándo comienza el viaje
Publicado el 16 de diciembre de 2024
¿Venís a Reta este verano? ¿Cuándo lo planeaste? ¿Cuándo lo decidiste? ¿Es tu primera vez o es un regreso? ¿Te preguntaste alguna vez dónde y cuándo empieza el viaje?
Desde el momento en que lo deseamos y nos animamos a soñarlo y hacemos cuentas, buscamos información, consultamos y planeamos, hasta que empieza a ser tangible, a volverse real. Y entonces reservamos el alojamiento, sacamos un pasaje y le contamos a alguien que lo vamos a concretar. Ahí es cuando comienza el viaje: porque todo lo que nos hace llegar hasta aquí es parte de él y de su disfrute.
Creo que fue el psiquiatra Carl Jung quien teorizó sobre las coincidencias para explicar que todo lo que nos ocurre tiene un propósito, algo así como que las sincronicidades indican que el camino es el correcto. Dicho en otras palabras: hay señales que nos van marcando por dónde va la cosa y a la armonía, eso que fluye y nos da la sensación de que algo es por acá, le decimos “se alinearon los planetas”.
Esta semana mi amiga -la rubia cantante que vive un poco lejos- me dio la noticia de que (si todo va bien, ruego a Dios, Jung, Freud y el universo para que así sea) se mudará cerca mío. El viernes, una amiga nueva me confirmó que vendrá a pasar unos días conmigo en Reta. Y hoy me reconcilié con otra amiga con la que estábamos distanciadas, la única que no se dio el lujo aún de conocer este paraíso. Capaz un día saque un pasaje, me caiga de visita y se anime a amasar pizza por primera vez en su vida. A eso, le llamaré sincronía.
Lo cierto es que cada uno tiene sus tiempos y las sincronías no son más que la coincidencia en el tiempo y el espacio. Por eso, si venís a Reta este verano, ayudanos a que la cosa funcione.
Somos un pueblo silencioso, nos gusta la calma que nos da la contemplación del mar y, como anoche, ver salir la luna desde su horizonte. Para eso, ni los cuatriciclos transitando la orilla y los médanos como si fuera un juego, ni la música a todo volumen en la playa, ni los motores a toda velocidad por el pueblo ayudan a generar y mantener el clima. Pensalo… Vos sos parte de la solución, no quieras ser el problema. La alegría puede ser colectiva; la responsabilidad, también. Así que buen viaje y ¡hasta pronto!
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